Por primera vez en Managua

A las 6 am comenzamos nuestro día, yo aún no me sentía completamente despierta para cuando ya estábamos camino a Managua. Es sorprendente la cantidad de gente, tráfico y ruido que hay ya a esa hora, es abrumador. El camino no fue largo, una vez en Managua preguntamos por la ubicación del Departamento de Servicios Aduanales, con las referencias que nos dieron logramos llegar sin problemas.

Sabíamos que el proceso de renovación de permiso no seria algo rápido ni fácil. Entré al lugar y había ventanillas para distinto procesos y gente por todos lados. Me dirigí a “recepción”, había una línea, asi que esperé, cuando llegó mi turno me enviaron directamente a “asesoría al usuario”. En este segundo punto había una libreta en la que anotabas tu nombre para estar en la lista de espera, anoté mi nombre. David fue por otro turno al área de “trámite de servicios”, teníamos el número 51 e iban en el 34. Esperamos un buen rato, el turno 51 llegó antes de que me llamaran en “asesoría al usuario”. David fue al área de trámites mientras yo esperaba a que me llamasen.

Resultó que el lugar para renovar el permiso del vehículo era en “tramite de servicios”, justo cundo David estaba llevando a cabo el proceso de renovación me llamaron para darme asesoría, solo sirvió para confirmar que era en el otro lugar en donde podían ayudarnos.

Al finalizar con el papeleo y con el pago de la renovación nos entregaron un ticket y nos dijeron que debíamos regresar mañana a recoger la hoja que valida la extensión del permiso – lo cual implicaría tener que viajar mañana una vez más hacia Managua, ya que hoy David trabaja en el hostal y en la academia - , por más que explicamos la situación no cambiaron la fecha de entrega, alegando que hoy no estaba la persona que debe firmar el documento “salió y no sabemos si va regresar”.

Decidimos quedarnos ahí a esperar si la persona que debía firmar la hoja regresaba. Estuvimos ahí hasta poco después de la 1 pm, no podíamos esperar más ya que se haría demasiado tarde y David no estaría a tiempo en el trabajo. Fue bastante frustrante haber perdido medio día ahí esperando y terminar con un “regrese mañana, la persona a cargo de la firma no se encuentra, salió”. Además… es sólo una hoja!!!! Por tanto mañana habrá que volver a Managua a primera hora, por lo visto yo me quedaré aquí en León ya que esta vez David piensa ir en un autobús “chicken bus” (es mucho más barato que pagar la gasolina de la Zaigua) y yo aun no estoy lista para ese ajetreo, aunque mi recuperación va muy bien.

Ahora después de dar clases y cenar, David esta tomando una siesta en la Zaigua, prefirió ir a la camioneta que quedase en la cama ya que tenemos dos compañeros de cuarto que entran y salen de la habitación (lo cual es bastante normal), además de que hay mucho movimiento, ruido, música…

Yo voy a juagar cartas un rato con Lance y Roman, más tarde estoy casi segura que David se nos unirá. Aun queda una larga noche, hoy toca cubrir el turno nocturno aquí en Sonati.

Andrea